LA Infanta Elena

Las últimas noticias de la Realeza. Monarquía vs. República
¿Cuánto reinarán Felipe VI y Letizia?


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ELENA ESTARA CONTENTA...

Mensajepor ELENA ESTARA CONTENTA... » Lun 13 Jul, 2015 2:47 pm

PARECE SER QUE ESTE ANO,SU HIJO FROILAN HA APROBADO EL ANO. http://www.abc.es. PAGINA GENTE&ESTILO. No se,pero abligar a estudiar a 1 adolecente 1 poquitin rebelde... lo veo muy dificil y supongo toda lo ayuda que habra tenido Froilan de profesores particulares.
No olvidemos que el hijo pequeno de Lady DI,le hacia el trabajo en ETON 1 profesora y por decirlo la pusieron de ''patita'' en la calle. Fue la profesora la que lo dijo.? Hubo muchos rumores de que la profesora no lo dijo, fue el mismo principe Enrique el que lo comento a sus companeros. Claro, que la verdad no la sabremos nunca. Pero puesta a creer NO CREO QUE FUERA LA PROFESORA LA CHIVATA. QUE YA SABEMOS QUIEN ES ENRIQUITO.
Por lo menos este ano, aunque haya sido a base de dinero en clases particulares, habra quien felicete a los padres de Froilan,pero en mi caso,no me gusta cuando a 1 adolecente se le obliga a estudiar a fuerza de dinero, sin gustarle los libros.
Assia

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Mensajepor Invitado » Sab 18 Jul, 2015 2:53 am

LA INFANTA ELENA está preocupada por el envejecimiento de su piel, a tenor de sus últimas compras cosméticas. Este jueves estuvo en la perfumería Primor del centro comercial La Gavia, en Vallecas (al que va a menudo), donde adquirió el serum Sesderma, con ácido hialurónico. Las dependientas quedaron encantadas con su amabilidad, cercanía y simpatía.

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Mensajepor Invitado » Vie 24 Jul, 2015 2:49 am

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Mensajepor Invitado » Vie 24 Jul, 2015 7:55 pm

La toalla que lleva la hija es de un hotel de Estepona, no del hotel en Mallorca donde están alojadas. ¿Se la habrán llevado del otro hotel? ¿Se llevarán también los jaboncitos y agunas cositas más?

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Mensajepor Invitado » Vie 24 Jul, 2015 8:41 pm

Qué fachón tiene esa niña, va a ser una mujer muy distinguida.

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poz vale

Mensajepor poz vale » Sab 10 Oct, 2015 2:46 am

Anonymous escribió:Qué fachón tiene esa niña, va a ser una mujer muy distinguida.


distinguida = fea

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LOC

Mensajepor LOC » Sab 10 Oct, 2015 2:49 am

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Sobre estas líneas, Doña Elena el pasado fin de semana junto a Victoria Federica en Sevilla


LUIS ASTOLFI
ENTRENADOR EVENTUAL Y GRATUITO DE LA INFANTA ELENA

La primogénita de los Reyes eméritos ya no tiene entrenador personal. Por ello, cuando su amigo Luis Astolfi puede, la ayuda a perfeccionar su técnica antes de las competiciones. Lo hace de manera desinteresada.

MARINA PINA


LA VIDA DE LA INFANTA ELENA ha cambiado mucho en el último año. A la hermana de Felipe VI la renuncia de Don Juan Carlos la excluyó de la Familia Real, la descargó de actos oficiales y le dejó más tiempo para su vida privada. Centrada en su trabajo en la Fundación Mapfre, Elena se ha dedicado este año a actuar como puente entre los diferentes borbones.

Vacaciones de verano con su padre y con su madre –por separado–, presencia en actos a petición de Felipe VI, viajes a Ginebra para estar con su hermana, la Infanta Doña Cristina, y tiempo para su familia. Además de todo esto, Doña Elena se ha volcado en la hípica, afición que tiene desde siempre y que inculca a su hija Victoria. Sin embargo, este año ha estado más sola que nunca a lomos de Qant, su caballo preferido.

Doña Elena galopa sola por las pistas del Club de Campo, donde tiene las cuadras de sus caballos. Entrena y recorre los circuitos. Nadie la guía. La primogénita de los Reyes ya no tiene entrenador que la ayude a mejorar su técnica hípica.

Durante años, a la Infanta la entrenó Felipe Zuleta. El militar se encargó de tutelar las horas de perfeccionamiento de la hermana de Felipe VI. Sin embargo, a principios de 2015 decidió prescindir de sus servicios. “Por sus compromisos laborales no podía entrenar con frecuencia y dejó de contar con Zuleta”, cuentan a La Otra Crónica fuentes del mundo de la hípica. Entonces se publicó que José Antonio de Wit de Guzmán velaría por perfeccionar su estilo. Se trata de uno de los mejores jinetes de España, que ha entrenado a grandes nombres de la hípica. Pero su trabajo con la Infanta se limitó a unos días de mayo.

El pasado fin de semana, De Wit y Doña Elena coincidieron en el CSN5* del Real Club Pineda, en Sevilla. Un torneo hípico donde ambos compitieron con sus caballos. Allí estaba también Luis Astolfi, íntimo amigo de la Infanta, con quien una vez más demostró su complicidad. En la pista, Astolfi y Doña Elena midieron juntos la distancia entre los saltos, departieron sobre otros jinetes y bromearon. En este último año Astolfi es más que un pilar fundamental en la vida de Doña Elena: se ha convertido en su entrenador. Eso sí, eventual y gratuito.


ENTRENADORES ESPORÁDICOS

Es el propio De Wit quien, en conversación telefónica con LOC, asegura que él no es el entrenador de la Infanta. “Eso se publicó pero no es así. Yo la entrené un fin de semana de manera puntual porque coincidimos”, cuenta. Él explica que no todos los jinetes cuentan con un entrenador a diario. “Como Doña Elena, muchos no pueden o no tienen tiempo para tener entrenamientos frecuentes con alguien, es normal”.

Extraña la falta de tiempo de Doña Elena para entrenar con un profesor. No en vano, desde la proclamación de Felipe VI, la Infanta ha visto cómo disminuía su agenda oficial. Desde que su hermano es Rey, y tal y como han confirmado a LOC desde Casa Real, Doña Elena ha acudido a tres actos oficiales en representación de Don Felipe. El 22 de noviembre estuvo en el funeral de la duquesa de Alba; el 4 de diciembre, en los Premios Nacionales del Deporte y, por último, el 3 de junio acudió a la corrida de la Beneficencia. Tres actos oficiales que no le permiten contar con los servicios de su entrenador de toda la vida, Felipe Zuleta.


CUMBRE EN SEVILLA

Quizá por ello la Infanta cuenta con la ayuda esporádica de Luis Astolfi. “Ahora en Sevilla le está entrenando él. Son amigos y la entrena siempre que puede”, revelan a este medio testigos presenciales de esas sesiones en Sevilla. Porque Doña Elena tenía planeado permanecer toda la semana en la capital hispalense.

Ayer comenzó el Campeonato de España Absoluto de Saltos de Obstáculos, al que la Infanta tiene planeado asistir, tal y como han confirmado a este medio fuentes del Real Club Hípico de Pineda, donde se celebra. De hecho, la mayoría de los jinetes que saltaron ya el fin de semana del 3 de octubre en Sevilla se quedaron allí. Es el caso de De Wit y de Luis Astolfi.

La Infanta, que suele compartir van –la camioneta donde se transportan los equinos– con otros jinetes, llegó el fin de semana pasado con la idea de permanecer en la capital hispalense. Hasta allí se desplaza siempre que puede. Ya que en la ciudad tiene buenos amigos, entre los que se encuentra Astolfi, que vive con su madre tras su separación.

Además de Astolfi y De Wit, en Sevilla se dan cita los mejores jinetes este fin de semana. En concreto los 20 mejores del ranking de hípica española están allí. No falta Sergio Álvarez Moya, número uno, ni Carolina Aresu, novena de España.

Doña Elena sólo iba a interrumpir su estancia en Sevilla el miércoles, cuando acudió al acto Soy Capaz de la Fundación Mapfre. Sin embargo, la repentina muerte del Infante Don Carlos de Borbón la obligó a permanecer en Madrid los siguientes días de la semana.

En la capital vive desde principios de septiembre con su hija Victoria. La adolescente ha comenzado sus estudios en un colegio británico en Madrid, donde ha vuelto tras dos años en el extranjero. Madre e hija tienen mucha sintonía y comparten aficiones.

El pasado fin de semana lo demostraron en Sevilla, donde la niña pudo montar a caballo junto a su madre. Rodeada por el ambiente de la hípica, Victoria no compitió, sin embargo aprovechó para practicar fuera del torneo. Como ha podido confirmar La Otra Crónica, la han apuntado a clases en el Club de Campo. Una de las primeras actividades extraescolares que tiene tras su llegada a Madrid. Victoria no dejó de practicar ese deporte durante su estancia en Reino Unido.


PREMIOS MILLONARIOS

La segunda hija de la duquesa de Lugo también pasó tiempo con Luis Astolfi, a quien conoce por ser íntimo amigo de su madre. Aunque de momento Victoria no tiene un entrenador personal, en el Club de Campo perfecciona su técnica. Es probable que, con su vuelta a España, Victoria comience pronto a competir. La hermana de Felipe Juan Froilán está registrada en la Federación Hípica de Madrid, donde los competidores nacionales pagan una cuota de entre 58 y 142 euros mensuales, dependiendo de la edad.

Tal y como se explica en el reglamento de la Federación Hípica Española, los menores pueden empezar a competir a partir de los 14 años. Victoria, de 15, puede apuntarse a torneos CSI1*. En esos concursos se salta una altura máxima de 1,40 metros de altura y el premio del ganador asciende, como máximo, a los 49.999 euros. El pasado fin de semana su madre, la Infanta Doña Elena, quedó novena en la prueba de salto de 1,20 metros. Se trataba de un CSI5*, por lo que el premio máximo ascendía a más de 450.000 euros.

Quien no ha heredado el gusto por la hípica ha sido Froilán. El niño acudía de pequeño a las competiciones de su madre, sin embargo, parece que no quiere practicar un deporte que, además de exigir mucha disciplina, supone un desembolso monetario importante.

Doña Elena paga 186 euros al mes por cada una de las cuadras que tiene en alquiler en el Club de Campo para sus dos caballos, Qant y Jordano. A este dinero hay que sumar los 15 euros mensuales de veterinario por equino y su cuota mensual por ser socia del club. Quizá por esos gastos, sumados al colegio de su hija en Madrid y al de su hijo en Estados Unidos, Doña Elena ha decidido prescindir de su entrenador. “A Zuleta le pagaba ella con su dinero”, confirman fuentes de Casa Real.







    EL ETERNO MEJOR AMIGO DE LA INFANTA MÁS DISCRETA

    Doña Elena tenía 23 años cuando conoció a su primer amor. Una joven Infanta de España terminaba su diplomatura en Magisterio cuando se enamoró. Su novio no podía ser más que alguien del mundo de la hípica, deporte al que siempre ha dedicado mucho tiempo. Entonces, el sevillano Luis Astolfi Pérez de Guzmán se convirtió en novio y compañero de pista de la Infanta. La pareja se rompió en 1989 después de tres años de relación. Luis se casó un año después con Isabel Flórez y continuó su amistad con Doña Elena. Seis años después, ella pasaba por el altar con Jaime de Marichalar y tenía dos hijos, más pequeños que los dos de Astolfi y su mujer. Son muchas las fotografías del jinete y la amazona juntos en competiciones hípicas. Sin embargo, no fue hasta 2012 cuando sus encuentros hípicos se volvieron más frecuentes. Doña Elena está separada de Marichalar desde el año 2010. En 2012 Astolfi hacía lo propio con su mujer. La soltería de los jinetes propició el acercamiento de la pareja. Tal y como publicó este medio en enero de 2014, su amistad es muy estrecha e intentan verse todo lo que sus agendas se lo permiten.


LA OTRA CRÓNICA EL MUNDO SÁBADO 10 DE SEPTIEMBRE DE 2015

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LA Infanta Elena

Mensajepor Invitado » Vie 04 Dic, 2015 11:38 pm

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La soledad de una Infanta

Mensajepor Invitado » Mar 15 Dic, 2015 2:09 am

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Doña Elena o la soledad de una Infanta

La próxima semana la primogénita de los Reyes eméritos celebrará su 52 cumpleaños apartada de la vida socia

El próximo 20 de diciembre la Infanta Doña Elena cumplirá 52 años. Perteneciente a la generación del 63, la primogénita de los Reyes eméritos Don Juan Carlos y Doña Sofía llegó al mundo en la clínica Nuestra Señora del Loreto, en pleno barrio de Chamberí (Madrid), donde el ginecólogo Mendizábal tenía el paritorio. Hoy, cinco décadas más tarde, la que consideran como «la más Borbón de los borbones» se ha convertido en un gran apoyo para Don Juan Carlos, su padre, y también para una hermana pequeña, la Infanta Doña Cristina, con la que se ha «reencontrado» en plena madurez y en medio de una complicada situación: el 11 de enero de 2016 comienza el juicio por el caso Nóos y la Infanta Doña Cristina se sentará en el banquillo junto a su esposo, Iñaki Urdangarín, y otros 16 acusados más.

Por ello, este 52 cumpleaños se celebrará de manera discreta. Será una reunión privada con sus hijos y con el reducido grupo de amistades que arropan a Doña Elena. Ella, a decir de muchos, ha sido la gran damnificada de los problemas que ha atravesado la familia. De momento, las consecuencias del escándalo que ha supuesto los negocios de su cuñado Iñaki Urdangarín, no sólo ha costado el título de Duquesa de Palma a Doña Cristina, sino que también ha tenido como efecto la desaparición casi total de Doña Elena en lo que a actos oficiales se refiere. Su agenda es tan breve, que ha sido borrada de la web de Casareal.es y de todos los actos protocolarios. Únicamente en aquellas reuniones que se consideran familiares es donde se ve a Doña Elena, como recientemente ocurrió durante los funerales por el Infante Don Carlos de Calabria en El Escorial. Aquel día estuvo arropando a su hermana Cristina, pues sabía que sería centro de todas las miradas y del comentario general.

Viaje al norte

A pocas semanas del juicio por el caso Noos, la presencia de Doña Cristina en España siempre es objetivo de los reporteros. De ahí que en territorio español su hermana mayor no se separe de ella, tal y como ya hizo un año atrás. Después de pasar la Nochebuena de 2014 con sus padres en La Zarzuela, Doña Elena cogió el coche, llenó el maletero de regalos para sus sobrinos y viajó hasta Vitoria para encontrarse con Doña Cristina y la familia Urdangarín.

Divorciada de Jaime de Marichalar, con quien tiene una relación fría y distante, Doña Elena divide su tiempo entre su trabajo en Mapfre, su entrenamiento casi a diario en el Club de Campo a lomos de su caballo y el cuidado de sus dos hijos, Victoria Federica y Felipe Juan Froilán. Precisamente este curso decidió que Felipe estudiara en Estados Unidos con el fin de mejorar su nivel académico y, también, de reconducir ciertos comportamientos que estaban dando más quebraderos de cabeza de los necesarios. Extrovertido, gamberrete y muy vivo, el nieto mayor de Don Juan Carlos ya pasó el curso anterior en un internado y en pleno brote de la adolescencia, la decisión de pasar un tiempo fuera parecía más que recomendable. Por ello, este curso está siendo más triste para la Infanta, pues, a pesar de la rebeldía de su primogénito, con él se lleva de cine. No en vano, ambos comparten la afición por los toros, el flamenco, la caza y la buena mesa.

La fiesta se acabó

Se equivocó quien pensara que por el hecho de estar soltera y sin la presencia diaria de su hijo la Infanta iba a recuperar el ritmo en cuanto a vida social se refiere. Para el recuerdo quedan los años en los que cerraba la discoteca Pachá o se divertía bailando hasta el amanecer en las fiestas de sus amigos. Hoy sus salidas siempre son para acudir a concursos de hípica, donde se siente más a gusto que en ningún otro lugar (ha recuperado muchas de sus amistades de soltera, como son los jinetes Luis Astolfi o Fernández Durán) o para encerrarse en las fincas de buenas amigas de toda la vida, que son totalmente leales y discretas.

Aunque ya no ejerce como secretario de las Infantas, la amistad y el cariño de Doña Elena hacia Carlos García Revenga permanece inalterable. A pesar de la denuncia de García Revenga por lo que considera un despido improcedente, sin indemnización ni acuerdo, la relación entre ambos no se ha quebrado. Hablan y se ven a menudo. García Revenga seguramente es el hombre con el que Doña Elena ha pasado más tiempo a lo largo de su vida.

Ajena a los cantos de sirena

Apartada de todo, sola, sin presencia en los medios y alejada de los círculos de moda que tanto atraen a su exmarido, la Infanta ni tan siquiera escucha los cantos de cuantos se proclaman «elenistas» y consideran que desde su nacimiento es la gran damnificada. Prefiere estar al margen y silenciar bocas que intentar buscar un protagonismo que nunca le ha interesado. «La suya es una vida tranquila para una mujer que ha sufrido mucho en silencio. Pocos conocen las situaciones que vivió para llegar al divorcio ni las tensiones que ha soportado cuando de golpe estallaron todos los problemas en su familia», cuenta un buen amigo. Considerada por muchos como el ojito derecho de su padre, a sus casi 52 años se mantiene como una mujer discreta, que adora a su hermano el Rey Felipe VI y que ha sabido asumir lo que significa borrarse del mapa y quedarse en un perfil bajo.

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Maxi

LA Infanta Elena

Mensajepor Maxi » Mar 15 Dic, 2015 10:57 am

Yo le deseo de todo corazón a esta señora que tenga suerte. La pobre entre la fama de tonta, de juerguista y por no es nada agraciada se ha llevado buenos palos en la opinión pública, se casó con un cretino y aquellos ideales con los que debió crecer se han ido al traste: un buen marido, una buena vida, unos hijos buenos.... en fin que las cosas no le han debuido ir muy bien en el terreno personal.

Yo creo que cuando las personas llegan a cierta edad saben ver la vida con otros ojos. Le deseo que acierte con sus decisiones aunque no la conozco de nada, se lo deseo a ella y a las personas que se ven en situaciones complejas. La posición social no sé si ayuda o perjudica, supongo que es mucho mejor el anonimato que verse expuest@, y el dinero pues no sé. Ayudará, aunque hay cosas que no se pueden comprar jamás.

Esta señora debe de ser una de esas auténticas monárquicas, o sea que lo que dioga el rey va a misa. Si su padre o su hermano en su momento dicen "pi" pues será "pi" aunque parecza o sea lo contrrio, lo cual tiene telita porque habrá que tragar lo que te pongan delante y obedecer al interés de una familia. Para mi tiene su mérito porque me parece bien difícil someterse de esa forma, no creo que fuera capaz de hacerlo.

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LA Infanta Elena

Mensajepor Invitado » Sab 19 Dic, 2015 6:21 pm

INFANTA ELENA
ENCANTADA CON SU VIDA COMO ‘ANÓNIMA’


La hermana de Felipe VI ha sabido sacar partido a dejar de formar parte de la Familia Real. Al principio no le gustó, ahora lo aprovecha para salir con amigos y cenar con Luis Astolfi. Mañana cumple 52 años

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El ‘plantón’ dado por la infanta Elena (52) a su amigo, el modista Petro Valverde, pese a haber confirmado su asistencia a la inauguración de la muestra que exponía once bocetos del traje de su boda con Jaime de Marichalar no ha sorprendido en su entorno. “No es una fecha que le ilusione conmemorar, dado que la relación con su ex marido es tensa desde su divorcio. Pero además suponía volver al ojo del huracán de la prensa del corazón, cuando lo que intenta es disfrutar ese ‘yo me quito de en medio’ que el año pasado fue de obligado cumplimiento, al ser apartada por su hermano Felipe de la familia real” asegura un miembro de su círculo.

A punto de soplar mañana, 20 de diciembre, las velas de su 52 cumpleaños, mucho ha cambiado el panorama vital de Elena de Borbón, que el 4 de diciembre de 2014 protagonizaba su último acto de la agenda oficial de Zarzuela, entregando junto a los Reyes y Doña Sofía los premios nacionales del deporte. Si en un principio le ‘escoció’ su defenestración, ahora está contenta por las ventajas que le aporta su relativo anonimato.

Por ejemplo, hace 30 años, en el apogeo de su idilio con el jinete Luis Astolfi, hubiera sido inimaginable comer con él en un lugar tan público como el restaurante del Club de Campo sin que una nube de paparazzi les amargara el postre, como ocurrió el pasado puente de la Constitución, en que ambos almorzaron con Victoria Federica. O asistir a la cena de gala que organizó la Fundación para la Promoción del Deporte Ecuestre el 13 noviembre en este mismo club, a la que acudieron ambos. Por no hablar de sus constantes ‘encuentros’ en concursos hípicos por España.

Precisamente su relación con el jinete sevillano, su gran amor, hoy también divorciado de Isabel Flores, es uno de los grandes misterios que envuelven la vida de la Infanta, pese a que se intenta barnizar de “amistad pura y dura”. Algo que no se acaban de creer sus allegados. “Han tenido muchas idas y venidas, pero están otra vez muy unidos y no sería extraño que acabasen juntos” revela un amigo común.

Astolfi ejerce ahora también como instructor hípico de Elena de Borbón, a la que imparte clases intensivas cuando ella se escapa a Sevilla, donde reside el jinete, o él viene a Madrid, como el pasado puente de la Constitución. Ha sido uno de los grandes cambios en la vida de la Infanta, que tras ser apartada de la familia real tuvo que prescindir de su profesor de equitación, Felipe Zuleta, quien fue su sombra durante una década. El militar reside ahora en Mónaco, donde ha sido contratado como instructor por el jinete español Iñigo López de la Osa.

No ha sido la única novedad: propietaria de dos caballos, “Qant”, que ahora se recupera de una lesión que le impide competir, y “Jordana”, una yegüita que suele montar Victoria Federica, la Infanta vendió su camión de caballos y ha adquirido uno de segunda mano más pequeño. Tampoco acude ya diariamente al Club de Campo, como antes, tan solo una o dos veces a la semana, el resto monta en un acuartelamiento cercano al Pardo, más discreto.


VICTORIA, SU FAN

El regreso de Victoria Federica tras dos años en un internado inglés ha sido lo mejor que le ha ocurrido, ya que madre e hija son uña y carne. De hecho le echaba tanto de menos que le llamaba diariamente a Inglaterra. La niña, que ahora estudia en el International School of Madrid (ISM) comparte su pasión por la hípica, que es su ilusión, junto al piano y la motito que le regalaron por su 15 cumpleaños en septiembre.

Además de acompañar a su madre a los concursos, se prepara para competir, aunque de momento sus obstáculos no superan el metro de altura. Es su mayor fan, tanto que cuando no gana, le “chorrea”, como ocurrió en octubre cuando la Infanta quedó segunda en un concurso en Madrid. “Hija, he hecho lo que he podido”, se justificaba.

La equitación, sus hijos y su trabajo en la fundación Mapfre conforman su mapa cotidiano. Directora de proyectos socio asistenciales con un sueldo de unos 200.000 euros anuales, su puesto conlleva un alto componente de representación institucional que suple el “gusanillo” por la vida pública. Así ocurrió en Lorca en mayo, donde se dio un baño de masas al acudir a un acto sobre la amenaza de los terremotos en los edificios históricos; o en septiembre en Cáceres, donde inauguró la semana de la prevención de incendios.

La quiebra familiar provocada por la separación de sus padres, Don Juan Carlos, al que adora, y Doña Sofía, y la ruptura entre los Reyes y la Infanta Cristina, han llevado a la Infanta Elena a refugiarse en un universo muy reducido de íntimos, en el que cobra especial protagonismo Luis Astolfi. Además de sus hijos, sobre todo Victoria Federica, ahora que Froilán, interno este curso en una escuela militar estadounidense, está lejos, aunque las vacaciones navideñas seguramente le van a permitir cantarle a su madre el cumpleaños feliz.

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LA Infanta Elena

Mensajepor Invitado » Mar 29 Dic, 2015 10:29 pm

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Doña Elena viajó a Ginebra para pasar la Navidad con su hermana y con Urdangarin

Por primera vez desde que residen en Suiza, los Urdangarin han celebrado las fiestas en su piso de Ginebra. Doña Elena y sus hijos viajaron hasta allí


Cuando apenas quedan 12 días para que comience el juicio por el caso Nóos (11 de enero), la Infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarin, han evitado estar en España durante las navidades como era tradicional, para evitar la exposición mediática.

Por primera vez desde que residen en Suiza, la familia Urdangarin ha celebrado las fiestas en su piso de la Rue des Granges, en Ginebra. Esta vez no han pasado las navidades en España, han preferido quedarse en Ginebra rodeados de su círculo más íntimo y con la visita de la infanta Elena y sus dos hijos Victoria y Froilán,que aterrizaron en Suiza el mismo día de Navidad.

El año pasado, los todavía duques de Palma, pasaron la Nochebuena en Vitoria donde recibieron la visita de la Reina Sofía y la Infanta Elena con sus hijos, el día de Navidad.

Así, la Infanta Elena se ha convertido en el miembro integrador de la Familia Real. Se maneja con soltura con su hermano, el Rey Felipe, y su cuñada, Letizia, con su hermana Cristina, de quien es su mayor apoyo, y con sus padres.

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LA Infanta Elena

Mensajepor Invitado » Sab 16 Ene, 2016 3:20 am

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FELIPE ZULETA
EN MÓNACO TRAS EL ‘DESPIDO’ DE LA INFANTA


Fue el entrenador de Doña Elena durante casi una década. Cuando le quitaron la asignación real decidió prescindir de sus servicios. Zuleta ha seguido compitiendo hasta que le ha fichado otro jinete. Con una excedencia de su trabajo como militar, ahora entrena en Mónaco a Iñigo López de la Osa, un importante promotor inmobiliario del principado.

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A raíz de que las infantas Elena y Cristina fueran relegadas de la Familia Real por su hermano, Felipe VI, para convertirse en “familia del Rey”, muchos de los personajes que formaban parte del decorado de su vida fueron desapareciendo del mapa. Como Felipe Zuleta, de 47 años, teniente coronel de la guardia real y hermano del actual hombre de confianza de Doña Letizia, José Manuel Zuleta, duque de Abrantes. Felipe fue durante casi diez años el instructor hípico de la Infanta Elena, y era considerado “su sombra”. Intimo de la duquesa de Lugo, se desataron incluso rumores de un romance entre ambos en el año 2008, meses después de anunciarse el “cese de la convivencia” con Jaime de Marichalar. Algo sin mucha base, ya que Zuleta estaba recién casado con la abogada Rocío Martín Diez, de 38 años, sobrina de Alfonso Diez, el viudo de la duquesa de Alba, a la que sigue unido y son padres de dos hijos, Candela, de cinco años y Felipe de tres.

En abril del año pasado la propia Infanta confirmó que Zuleta ya no era su instructor, algo que causó gran sorpresa porque se desconocían los motivos. Según ha revelado a LOC un miembro del círculo de Felipe, tienen que ver con otro jinete español, Iñigo López de la Osa Escribano, afincado en Mónaco y casado con la millonaria italiana y empresaria inmobiliaria Francesca Franco. “Iñigo le ofreció a Felipe convertirse en su entrenador, poniéndole sobre la mesa una oferta en euros difícil de rechazar, que según tengo entendido incluye vivienda en Montecarlo y gastos pagados. A Felipe le apetecía “cambiar de aires”, por lo que pidió una excedencia temporal en la Guardia Real, trasladándose a vivir a Mónaco en compañía de Rocío y sus hijos”.

Un cambio de Corte, y nunca mejor dicho, ya que Francesca Franco y su marido Iñigo, dueños de una de las más pujantes promotoras inmobiliarias de Montecarlo, López de la Osa&Franco Real State, son íntimos de los soberanos monegascos, Alberto y Charlène. Y fijos en todos los saraos de postín del Principado, como el baile de la Rosa, donde en 2010 acudieron con Borja Thyssen y su mujer Blanca.

También se mueve como pez en el agua entre la aristocracia europea, donde ha acudido a eventos como la boda de los duques de Vendôme, en 2009, a la que asistieron la princesa Astrid de Bélgica, los duques de Wurtemberg y los herederos al trono portugueses, duques de Braganza.

López de la Osa, de 45 años, tiene una atípica trayectoria como jinete: empezó a montar a los siete años y a los 15 obtuvo la medalla de bronce en el campeonato de España, pero tuvo que interrumpir estos brillantes inicios al ser incompatibles con la carrera de medicina que estudiaba. Nieto del general Mariano Escribano de la Torre, director de la Academia de Caballería de Valladolid, Iñigo es hijo de un afamado ginecólogo, Eduardo López de la Osa, jefe de ginecología del hospital San Carlos de Madrid, y vicerrector de la universidad complutense.


DE MÉDICO A PROMOTOR

Su madre, Paloma Escribano, propietaria de las bodegas Valsardo, en Peñafiel, fue la primera mujer viticultora de España. De sus cinco hijos, Eduardo, Alfonso, Paloma y Pilar, sólo Iñigo siguió los pasos paternos en la medicina, y fue estudiando la especialidad en Bruselas donde conoció a Francesca Franco, quien le convenció para afincarse en el Principado, donde residen hace más de 14 años. Allí, Iñigo colgó la medicina para asociarse con su mujer en el negocio inmobiliario, y retomó tardíamente su carrera de jinete, ya que fue acompañando a su hijo, Iñigo, a montar en el hipódromo de Solaro, en San Remo, cuando sintió de nuevo el gusanillo de la competición.

Propietario de dos excelentes caballos, Sultán Beaufour y Cascin de Blom, ha ido haciéndose hueco los últimos años en las competiciones internacionales punteras, como el global de Madrid, que se celebra en el Club de Campo. Allí coincidió con Felipe Zuleta, iniciándose las conversaciones para llevárselo a Mónaco como instructor. El 26 de junio de 2015 López de la Osa recogía el trofeo de ganador en el campeonato de Mónaco de Saltos, de manos de la princesa Carolina y su hija, Carlota. Todavía era un secreto que Felipe Zuleta, la “sombra” de la Infanta Elena, había cambiado de corte, dejando atrás Zarzuela y su casa de Torrelodones, en Madrid, para afincarse en el glamuroso Mónaco con su familia.


LA OTRA CRÓNICA EL MUNDO SÁBADO 16 DE ENERO DE 2016

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vidorra

LA Infanta Elena

Mensajepor vidorra » Sab 30 Ene, 2016 3:51 am


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LA Infanta Elena

Mensajepor Invitado » Vie 25 Mar, 2016 10:11 pm



Salida del Cristo de los Alabarderos del Palacio Real
La Infanta Doña Elena protagoniza, como cada año, una de las levantadas de la Imagen del Cristo de los Alabarderos antes de su salida del Palacio Real.




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