La abuela y el padre de Letizia, felices por el embarazo, pese a las críticas de la prensa rosa
A la izquierda, la portada de «Semana», en la que califica de polémico el embarazo de Letizia. A la derecha, «Diez Minutos» ilustra su portada con la Infanta Leonor, para titularla: «Un futuro de dudas».
El ovetense Jesús Ortiz, padre de doña Letizia, acudió ayer en Madrid a la convocatoria del consorcio turístico Villas Marineras del que forman parte Ribadesella, Cudillero, Gijón y Llanes. Ortiz se confesó «muy contento» por el futuro nacimiento del segundo vástago de los Príncipes de Asturias «porque siempre es una buena noticia que venga un niño al mundo», informa «Moddem Press».
Sobre el posible conflicto sucesorio que supondría el nacimiento de un varón, Jesús Ortiz afirmó que «no creo que esto suponga ningún tipo de polémica. He tenido tres hijas y tengo hermanas y estoy encantado con ellas». El periodista asturiano restó importancia a la cancelación de algunas apariciones públicas de su hija ya que «se encuentra bien aunque con las molestias normales de las primeras semanas de embarazo».
También la abuela de la Princesa de Asturias, Menchu Álvarez del Valle, se mostró encantada con el embarazo de su nieta, de quien dice está bien, aunque con las molestias típicas de una embarazada. Al comentarle que se está quedando muy delgada por las náuseas, Menchu respondió que «delgadita ya estaba. Es normal, lo anormal es que no ocurra nada».
Al preguntarle sus preferencias por si le gustaría que el bebé fuese niño o niña, Menchu apuntó no importarle. «Me es igual; que venga bien que es lo importante y nada mal».
Por último, la Princesa de Asturias sigue siendo portada en las revistas del corazón, una semana después de que se hiciera público su embarazo. Las publicaciones recogen los comentarios de la propia Letizia, que ha asegurado que se encuentra «regular». En una cena con periodistas, se sinceró incluso más y explicó que este embarazo está siendo peor que el que tuvo con Leonor porque «apenas puede contener las náuseas».
«Semana» va más allá y ahonda en la polémica de este embarazo, haciéndose eco de las voces más críticas, que no ven bien que esta gestación se lleve a cabo antes de la reforma constitucional y que se haya anunciado tan pronto.
Sin embargo, ahora parece claro que la Casa Real ha visto en esta decisión la más acertada ante las molestias de la Princesa, ya que de este modo se acallan los rumores sobre su delgadez y se evitan especulaciones sobre trastornos alimenticios o abortos.